Infecciones respiratorias agudas: lo que debes saber

Las infecciones respiratorias agudas (IRAs) son una de las causas más comunes de enfermedad en todo el mundo. Afectan especialmente durante los cambios de clima, el invierno o en temporadas de virus estacionales.

Estas infecciones pueden parecer inofensivas al inicio, pero si no se tratan correctamente, pueden complicarse y afectar seriamente tu salud o la de tu familia.

Por eso, es fundamental que conozcas sus síntomas, formas de contagio y las mejores estrategias para prevenirlas desde el primer momento.

¿Qué son las infecciones respiratorias agudas?

Las infecciones respiratorias agudas (IRAs) incluyen desde un simple resfriado hasta neumonía. Su inicio suele ser repentino y los síntomas avanzan rápidamente.

Entre los signos más comunes están la tos, fiebre, congestión nasal, dolor de garganta y dificultad para respirar.

Algunas IRAs son virales, como la gripe, y otras bacterianas, como la amigdalitis. Por eso, no todas requieren antibióticos.

¿Por qué debes prestarles atención?

Si bien muchas IRAs se curan solas, pueden empeorar si no las tratás correctamente.

En niños, adultos mayores o personas con enfermedades crónicas, las IRAs pueden causar graves complicaciones.

Además, algunas infecciones respiratorias agudas pueden derivar en hospitalizaciones si no se controlan a tiempo.

Tipos más comunes de IRAs

A continuación, te mostramos las infecciones respiratorias agudas más frecuentes, separadas según su origen:

IRAs virales más comunes

1. Resfriado común (rinovirus)

2. Gripe o influenza

3. COVID-19

4. Bronquiolitis (en bebés, por virus sincitial respiratorio)

5. Faringitis viral

IRAs bacterianas más comunes

1. Neumonía bacteriana (Streptococcus pneumoniae)

2. Faringoamigdalitis estreptocócica

3. Sinusitis bacteriana

4. Otitis media aguda

5. Tos ferina (Bordetella pertussis)

¿Cómo prevenir las infecciones respiratorias agudas’

Para evitar contagios, lavate las manos con frecuencia, ventilá los ambientes y evitá el contacto con personas enfermas.

Otra medida clave es mantener tus vacunas al día, sobre todo contra la gripe y el COVID-19.

También es útil usar mascarilla en lugares cerrados o con poca ventilación, sobre todo si hay brotes.

¿Cuándo consultar al médico’

Si tenés fiebre alta, dificultad para respirar o tos persistente, consultá de inmediato.

Detectar a tiempo una infección respiratoria aguda mejora mucho el pronóstico y evita riesgos innecesarios.